Envejecimiento activo y saludable
En la etapa adulta es fundamental cuidar aspectos como la salud, el bienestar emocional y material, las relaciones personales, el desarrollo personal, el mantenimiento del empleo, el mantenimiento de habilidades de la vida diaria y la inclusión social. Es necesario estar atentos para detectar los primeros síntomas de envejecimiento o deterioro, para dar respuesta adecuada a las distintas necesidades.
Como en otras etapas y programas, se trabaja con la persona con Síndrome de Down, con las personas con Discapacidad Intelectual, pero también con sus familias. Apoyamos un envejecimiento activo y saludable que mejore su la calidad de vida, a través de la metodología centrada en la persona, un enfoque preventivo e interdisciplinar.